Proyección
Perspectivas económicas 2023
Argentina terminó el 2022 con un crecimiento de su economía cercano al 5%, muy por encima de lo que muchos suponían (incluso el propio gobierno).
Los factores más decisivos de ese incremento fueron: las exportaciones primarias (apuntaladas por la suba global en los precios de los comodities), la producción automotriz y de electrodomésticos (debido principalmente a las restricciones en la importación), y el petróleo (incremento de la producción ligado a las inversiones en vaca muerta).
El 2023 comienza con mucha incertidumbre, un entorno en al cual los argentinos ya estamos acostumbrados, pero ahora parecería mucho mayor ¿Por qué? Porque esta vez la economía está en una zona límite, los precios no paran de subir llegando a índices previos a una hiperinflación, los niveles de deuda son insostenibles y la pobreza es alarmante, además el gobierno de coalición, se percibe fracturado, débil y sin margen para atravesar un proceso electoral.
En este sentido, la mayoría de las consultoras han concluido que la economía va a estar estancada durante el 2023 con un crecimiento promedio del 0.2%. Pero para realizar una proyección seria, del desenvolvimiento económico en el próximo año, habría que analizar los principales determinantes de la economía argentina para el 2023.
Variables Externas
- Interés de USA: se espera que la FED mantenga durante 2023 altas tasas de interés, lo cual puede repercutir en un encarecimiento del financiamiento para el Gobierno.
- Economías Desarrolladas: se estima un magro crecimiento para Europa y Estados Unidos (1,5%), lo cual podría disminuir la demanda externa de nuestros productos.
- Economías Emergentes: en este tipo de países, el crecimiento es más heterogéneo, pero se podría se espera un crecimiento mayor de Brasil y China, los cuales son el destino principal de nuestras exportaciones.
- Comodities: debido a la incertidumbre global, es lógico esperar que los precios de dichos productos se mantengan altos, lo cual beneficia nuestros términos de intercambio.
Variables Internas
- Política Monetaria: sin dudas uno de los principales problemas de la economía actual, con vencimientos en bonos que son superiores a 5 veces el dinero circulante, su refinanciación es uno de los mayores desafíos. Hasta ahora el gobierno ha podido refinanciar una parte de su stock, pero el 2023 tiene los mayores vencimientos de la historia.
- Sequia: Parece que el motor de la economía nacional deberá seguir soportando un clima adverso en gran parte del 2023 lo que baja las perspectivas de ingreso de divisas y crecimiento económico.
- Vaca Muerta: Hay grandes avances en el sector y es posible que se profundicen el próximo año. Lo cual claramente mejora las perspectivas en el sector energético y en la balanza de pagos.
- Conflicto Social: la puja distributiva estará potenciada por el año electoral y la incertidumbre general de un gobierno que no marca el rumbo.
- Inflación: el principal problema de los argentinos estará atado al comportamiento de las variables descriptas anteriormente. Sin embargo, si continúa la tendencia actual, se podría esperar una inflación algo menor que en 2022.
De estos escenarios, el que mayores probabilidades presenta es el de estabilidad media, en ese marco se puede proyectar un crecimiento de la economía cercano al 1.5%, una inflación del 85% y micro-devaluaciones que mantengan el dólar oficial cercano a ese porcentaje, en cuanto al dólar blue es muy difícil de predecir su valor para todo un año pero se puede esperar que crezca menos que el índice de precios de enero a agosto, se incremente entre agosto y octubre, y se desacelere con un resultado positivo de JxC en las urnas. (suba total cercana al 60%)
En este contexto, el gobierno puede lograr que no explote la bomba hasta octubre. Es decir, las principales variables macroeconómicas (inflación, desempleo y PBI) van a tener un comportamiento similar al de 2022 durante el primer semestre, luego se pueden esperar algunos overshooting, los cuales podrán ser estabilizados cuando se informe el plan económico del nuevo gobierno (suponiendo que hay uno nuevo).
Finalmente, el 2024 tendrá un mejor contexto, con mayores perspectivas de crecimiento y estabilidad, ya que como escribió una vez Milton Friedman “La expansión de la libertad económica traerá en consecuencia mayores libertades políticas…” y ese proceso parece retroalimentarse.