Las Pyme registran una baja en la producción, pero mantienen el nivel de empleo
El segmento retrocedió 4,5% interanual en abril, al tiempo que acumula una baja de 4% en el primer cuatrimestre de 2014. Sin embargo, más del 80% de las empresas del rubro dijo que en el periodo mantuvo sus nóminas de personal sin cambios.
Un estudio de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) que consultó a 200 pequeñas y medianas empresas del país resaltó que, si bien la industria Pyme está en retroceso –debido principalmente a menores pedidos de producción, las fuertes subas en los costos y el incremento en las tasas de financiamiento–, las compañías pequeñas y medianas están sosteniendo sus planteles de personal.
Del total de empresas relevadas, solo el 11% declaró estar registrando incrementos en sus niveles de producción en abril, en tanto que el 59% afirmó estar operando en baja. El 30% restante sostuvo que se mantiene con los mismos volúmenes de producción del mismo mes de 2013.
Los problemas de producción están alcanzando a prácticamente todas las ramas industriales. Según el relevamiento mensual, las 11 ramas manufactureras relevadas por CAME finalizaron abril con bajas interanuales.
Las ramas manufactureras evaluadas por la CAME que registraron las bajas más profundas fueron: Material del Transporte (-13,5%), Productos de caucho y plástico (-6,5%) y Productos electromecánicos e informática (-6,2%).
Así, la producción del segmento Pyme tuvo una caída interanual de 4,5% en abril, con lo que acumuló una baja promedio anual de 4% en los primeros cuatro meses del año. Sin embargo, el 81,2% de las Pyme consultadas dijeron que entre enero y abril mantuvo sus planteles de empleados.
Asimismo, un 9,6% respondió que lo redujo, aunque esa caída quedo compensada por otro 9,1% de empresas que incorporó personal durante el periodo.
La CAME además adelantó que, si bien la actividad de las Pyme viene en retroceso desde agosto del año pasado, este año la caída se aceleró: si entre agosto y diciembre de 2013 la producción Pyme cayó a una tasa promedio de 1,3% anual (de acuerdo con las mediciones de la asociación), entre enero y abril de este año la caída promedio se triplicó, y llegó a 4 por ciento.
La baja en la actividad de las Pyme se explica por el menor consumo interno y los menores pedidos de exportación, en especial desde Brasil. Estos factores en abril de este año se notaron con mayor intensidad que en meses anteriores, panorama al que se sumaron subas más marcadas en los costos de producción (10,5% promedio acumulado en los primeros cuatro meses del año) y el poco margen de los empresarios para absorberlos sin trasladarlos a los precios.
En este sentido, en abril sólo 17,1% de las industrias dijo estar operando con rentabilidad positiva. En cambio, el 34,7% aseguró que tuvo rentabilidad negativa, y otro 48,2%, nula. En comparación con el mismo mes del año pasado, el 44,3% de las Pymes observa que su rentabilidad empeoró.
Consultados acerca de cómo prevén que evolucionará la producción de sus compañías en los próximos seis meses, los empresarios se mostraron cautos.
El 23% espera aumentos, mientras que un 38% cree que la producción seguirá cayendo. El restante 39% opinó que se mantendrá en los niveles actuales, que de por sí, para la mayoría no son buenos
La CAME agregó que la inversión se mantuvo mayormente frenada en el segmento Pyme durante los últimos meses: su relevamiento señaló que el 82,9% de las empresas reveladas no realizó nuevas inversiones entre enero y abril, en tanto que el 17,1% hizo algún desembolso destinado principalmente a incorporar alguna innovación.