Una experiencia tecnológica que se consolida
En la última edición de este importante evento volvió a reinar el espíritu colaborativo que hace de estas reuniones un espacio único para intercambiar opiniones, aprender del otro y ser más eficiente.
Experiencia Forrajera y en Cosecha ya es un clásico del calendario agropecuario. La jornada organizada por CLAAS se ha convertido en un lugar donde productores, asesores y contratistas no solo se capacitan en las últimas tecnologías, también comparten experiencias y se acercan a las propuestas de otras empresas.
Ante una importante cantidad de público, en cada edición las empresas exponen la mejor tecnología en forrajes y cosecha. En esta oportunidad, Experiencia fue elegida por Mainero para presentar por primera vez en el campo su Segadora 6071, y lo hizo acompañada de otro nuevo producto: la rotoenfardadora 5887.
“La primera es una novedad total en el mercado”, afirmó Marcos Formica, del área de asistencia técnica y desarrollo de la compañía. Su lanza pivotante de tiro central le permite desplazarse a la izquierda y derecha del tractor en las cabeceras, lo que genera un corte más de frente y mucho más versátil. Además, posee un sistema de acople a la barra de tiro “Gyrodine” que le otorga más maniobrabilidad y movilidad.
Las casi 300 personas que asistieron a la jornada también pudieron ver en acción la segadora DISCO 1100 RC de CLAAS, que recientemente entró al libro Guinness por batir la marca mundial de corte alfalfa (140 hectáreas de alfalfa en apenas 8 horas). “Es un orgullo mostrar este tipo de equipos acá en Sunchales. A pesar de las condiciones difíciles de financiamiento, seguimos apostando al sector productivo trayendo nuevas tecnologías y poniéndolas a disposición de nuestros clientes”, completó Postacchini.
Pero no son los únicos fierros que se pudieron ver en la primera parada a campo que tuvo como protagonista a la alfalfa. Por allí también rodaron los acoplados Fontanini, de 40 metros cúbicos y 7,5 metros de largo, especiales para trabajos forzados e intensivos; y la embolsadora de forrajes Richiger R10-230D, para bolsas de 9 y 10 pies.
En alfalfa se trabajó con dos materiales provistos por la firma KWS: Ruano y Mecha. La primera, un Grupo 10 de alto potencial de rendimiento, ideal para hacer rollos, fardos o megafardos; la otra, un Grupo 9 también de alta producción. “Son consideradas de elite en el mercado, de muy alta calidad y con muy buenas características sanitarias”, agregó Gastón Añez, representante del semillero.
“Hay que tratar de realizar el corte de alfalfa en el momento oportuno, no superando el 10% de floración, pero fundamentalmente viendo que el estado de rebrote no tenga más de 5 centímetros. Así no se afecta la producción de los siguientes cortes y a su vez se aprovecha buena parte de los nutrientes”, recomendó Federico Sánchez, del INTA Manfredi. A su vez, propuso cortar el forraje realizando un pre-oreo para perder entre 15 y 20 puntos de humedad y poder ensilar con 40% de materia seca. En otro apartado de su exposición, aconsejó la incorporación de cultivos de invierno, que son una excelente fuente de fibra y encajan muy bien en las rotaciones de cultivos.
Luego llegó el turno de la parada de maíz, donde Oscar Zen, de la Universidad Nacional del Litoral, resaltó la importancia de una nutrición estratégica de los suelos para lograr una mayor productividad. “Nuestra obsesión debe ser favorecer la formación de poros, y para eso necesitamos de mayor materia orgánica”, explicó el ingeniero agrónomo.
Para ello, concordó con Federico Sánchez en que es vital la integración de cultivos de servicio y no dejar nunca el suelo desnudo, sino entremezclar material. En tanto, para la fertilización química, se mostraron las bondades de la fertilizadora autopropulsada Jacto Uniport 5030. “Es una máquina que aplica con mucha precisión el fertilizante sólido. Posee un sistema automático que regula el punto de caída para la distribución, la cinta y el formato de las paletas. Esto trae muchos beneficios porque da mucha facilidad en la regulación, calidad y uniformidad de la aplicación”, señaló Fernando Herrero, representante comercial de Jacto.
Luego, Gustavo Saldaña de BASF y Mauricio Acosta de Agroservice KWS se refirieron a las claves para el control de insectos y malezas en el cultivo. Acosta repasó como combatir a las principales plagas que afectan al maíz. Entre las que se encuentran las orugas cortadoras, gusanos blancos, barrenador del tallo, oruga de la espiga y cogollero (spodóptera). Recomendó realizar un exhaustivo monitoreo tomando como base 50 plantas seguidas dentro de un mismo surco. Asimismo, aconsejó realizar un mínimo de 2 a 3 mediciones en lotes de 20 a 50 hectáreas.
En cuanto al control de malezas, Acosta remarcó que el momento de aplicación de los herbicidas lo define el estado fenológico de la maleza y la mayoría de las veces es lo que determina la eficiencia de la aplicación. En ese sentido, recordó que el período crítico es desde la siembra hasta la sexta hoja como promedio (alrededor de 30 días desde emergencia). Excepto en gramíneas, donde se reduce a la 4ta hoja.
Por su parte, el especialista del INTA, Federico Sánchez, brindó algunas claves para eficientizar la cosecha de trigo. “En este momento estamos registrando niveles de pérdida superiores a los 115 kilos por hectárea”, alertó el investigador acerca de la actual campaña, cuando lo aconsejable es no superar los 80 kilos. “Es fundamental realizar los ajustes en la altura del corte, para captar todas las espigas pero sin ingresar material no grano”, agregó. Prestar atención a la regulación del viento y tratar de no generar trilla agresiva son otros dos puntos fundamentales para no perder mayor rendimiento.
Por último, en el auditorio, Nicolás Calcabrini, representante de Sancor Seguros, habló sobre la gestión de riesgos en las empresas agropecuarias; mientras que Javier Baudracco y Belén Lazzarini, de la Universidad Nacional del Litoral, se refirieron a cómo lograr sistemas lecheros simples y eficientes. Según los expertos, la clave pasa por hacer un uso adecuado de los forrajes con un manejo simplificado.
Luego llegó el momento de analizar la coyuntura económica y política del país de la mano del economista Carlos Melconian. El analista hizo un repaso de las implicancias que durante los próximos meses tendrá para la economía el acuerdo entre el Gobierno y el Fondo Monetario Internacional (FMI). En ese sentido, Melconian indicó que la nueva política cambiaria se basa en bandas amplias de flotación más “psicológicas” que prácticas. Mientras que calificó como “durísima” a la nueva política del Banco Central, basada en “crecimiento cero‘ de la base monetaria hasta junio del 2019.