Santa Fe, menos afectada por la “primarización” de las exportaciones argentinas
Un trabajo de la Bolsa de Comercio revela que la provincia se perjudicó menos ante la caída de precios de las commodities por contar con una plataforma exportadora con mayor participación de Manufacturas de Origen Agropecuario (MOA).Imprimir
Juan Manuel Fernández | @jotafernan
La pérdida de valor que sufrieron las exportaciones argentinas en los últimos quince años fue menor en la provincia de Santa Fe gracias a una matriz más industrializada, que se refleja una participación superior de Manufacturas de Origen Agropecuario (MOA) versus un proceso de “primarización” del comercio exterior argentino, indicaron desde el Centro de Estudios y Servicios de la Bolsa de Comercio local.
Al analizar la performance exportadora entre 2004 y 2019, el trabajo destaca que se generó una caída de valor desde casi 84.000 millones de dólares exportados en 2011 hasta 65.000 millones el año pasado, a pesar de que los volúmenes crecieron de 100 a 130 millones de toneladas. Este resultado se explica en un derrumbe de las ventas de combustible y energía, en contraposición a un salto en la participación de productos primarios pero a precios mucho más bajos.
“Lo que quisimos mostrar es la pérdida de divisas para el país, algo muy necesario para mantener la macroeconomía”, indicó Lucrecia D’Jorge, directora del CES. Una de las cuestiones a resaltar es la “primarización” de las ventas al exterior con una participación de las materias primas sobre el total exportado que creció de 34 a 49%. A eso se agrega una considerable retracción del precio FOB de estos productos, que por ejemplo en soja implicó pasar de u$ s 600 a poco más de u$ s 300 en la actualidad.
Según la metodología de análisis, la pérdida de valor oscila entre 25 y 40%. “Si los principales productos de exportación de Argentina hubiesen mantenido un valor similar a 2011, en 2019 se hubiesen superado los 90.000 millones”, agregó la economista. Al observar los números de la provincia, los montos exportados descendieron desde u$ s 17.800 millones en 2011 a u$ s 14.271 millones en 2019, aproximadamente 20 % menos. En cambio los volúmenes crecieron en la misma proporción, al pasar de 29 a 35 millones de toneladas en el período.
Por otra parte subrayó: “en la provincia de Santa Fe en particular se observa lo mismo pero al ser una provincia donde predominan más las MOA, sobre todo harinas y residuos de la industria aceitera de soja, la caída es menor en relación al país”. Sí se mantiene la participación de la provincia, que ronda el 20% del valor y un 25% en volumen del total exportado por el país.
El trabajo se plantea, ante el nuevo escenario mundial que plantea la pandemia de coronavirus, “conocer la situación de base en que se encuentra el país”. En ese sentido, D’Jorge sostuvo que la ventas al exterior venían disminuyendo en el primer trimestre, proceso que se agudizó con la crisis sanitaria. “En Santa Fe todos los complejos se vieron afectados por el cierre de los mercados internacionales”, dijo, especialmente soja, carne y lácteos. Y estimó que “probablemente el segundo trimestre se repita el resultado negativo”.
Sin embargo, los analistas internacionales ven en el segundo semestre una posibilidad de “rebote” en los países centrales. “Si se da la recuperación en V que se espera puede ser que esto genere apertura de mercados; y si Argentina mantiene las condiciones para seguir produciendo entonces podremos acoplarnos a esta demanda”.
D’Jorge explicó que hoy “el gran problema” es que los sistemas de producción que están sufriendo la caída del mercado interno intentarán la salida exportadora en un contexto en el cual aún no se avisora una reactivación. “Se acentúa la sobre oferta”, advirtió, aunque valoró: “lo importante es que se sigue produciendo”.