Más trabajo regional y menos asistencialismo en conurbanos
“En promedio, la hacienda en pie que va al frigorífico recorre entre 550 y 600 km para ser faenada. El flete es costoso y se calcula por kilos; si lo realizamos con productos elaborados, se agrega valor en origen, se da empleo a la gente y se bajan los costos”.
Dardo Chiesa, coordinador de la Mesa de las Carnes en la Argentina, aseguró que “el tema de la industrialización es indispensable para nuestros pueblos”. El dirigente ruralista recordó que “la ganadería es la actividad más federal: en cualquier lugar de la Argentina podés tener una vaca, una oveja, un chancho o una cabra. El desafío de la cadena de la carne es generar la industrialización”.
El dirigente habló durante la presentación del informe sobre Empleo en las Cadenas Agroindustriales de la Fundación Agropecuaria para el Desarrollo de Argentina.
Natalia Ariño (economista de Fada) reveló allí que sólo la cadena de la carne bovina genera en el país 422.306 puestos de trabajo (11 % del empleo de la agroindustria), con 263.649 puestos en el primer eslabón (cabaña, cría, invernada, feed lot y servicios pecuarios), otros 77.599 puestos en comercialización mayorista y minorista, 64875 en la industria y 16.183 empleos en el transporte.
Chiesa recordó que en la década pasada se perdieron 12 millones de cabezas de ganado (el equivalente a todo el rodeo de Uruguay) por malas políticas, pero señaló que el sector se viene recuperando desde 2015. “Hoy peleamos el cuarto puesto otra vez” a nivel mundial, afirmó.
Pero advirtió el desafío de “aumentar los porcentajes de preñez” porque en el país “de cada 100 vacas obtenemos 60 terneros” y “deberíamos alcanzar 80” para dar “sustentabilidad al negocio”. Además, aclaró la necesidad de homogeneizar -en lo posible- la productividad, porque ese indicador es de 90 en Buenos Aires, pero baja a 36 en MIsiones.
Chiesa cuestionó que en el país “se habla de conurbanos”, generados por “gente que no encontró trabajos en sus lugares y migra. En la mayoría de los casos terminan viviendo de la asistencia social”.
Sostuvo que en la actualidad “todas las cadenas agroindustriales empiezan a tener saldos exportables”, pero para generar empleo de calidad y con sentido federal se deben revisar las retenciones al 15 % o “los impuestos que frenan todo”, incluyendo Ingresos Brutos en las provincias.
En esa línea Chiesa recordó que las cadenas agroindustriales -que irán a la Casa Rosada el 14 de octubre- “podrían generar generar de 180 a 200 mil puestos de trabajo más en 5 años” con políticas federales. “Es lo que le estamos diciendo al gobierno”, remarcó, “para que los chicos no se tengan que ir de sus pueblos o del país”.
Estabilidad
“Un galpón de pollos de última generación cuesta un millón de dólares”, ejemplificó Chiesa. Explicó que se necesitan políticas macro de estabilidad, “para que no pase lo de los biocombustibles”, con cambios permanentes en las políticas de cortes a naftas y gasoil, o aperturas y cierres de mercados que “van frustrando” la inversión.
Empleo
En Argentina las cadenas agroindustriales (CAI) generaron 3,7 millones de puestos de trabajo formal, representando el 22% del empleo privado a nivel nacional. Si se tiene en cuenta el empleo privado más el público, las CAI explican el 18% del total del empleo en Argentina. Carlos Schilling, presidente de FADA, explicó que el trabajo de la Fundación midió 18 cadenas que representan 250 actividades económicas y que “pueden dar rápidas respuestas” a la demanda laboral en el país.
Crecimiento
Agustín Tejada, economista en jefe de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, afirmó que “La Argentina “tiene la política agropecuaria más negativa del mundo”, que del estancamiento pasó incluso al retroceso por la pandemia. Señaló que se perdieron 4 millones de puestos de trabajo en el cuatrimestre y pidió “retomar el sendero que iniciamos en 2015” para generar “500 mil empleos y U$ S15 mil millones de exportaciones” en 5 años. “Podríamos tener tasas de crecimiento del 35 % en 10 años”, afirmó.