La mitad de pymes y comercios de Santa Fe admiten estar “a medio camino” del cambio digital
La Oficina de Transformación Digital del municipio realizó un relevamiento sobre las necesidades del sector productivo de la ciudad. Ahora comienzan las capacitaciones sobre las herramientas disponibles para mejorar la eficacia y competitividad. Apps gratuitas, software de gestión y redes, las estrategias aliadas.
Luciano Andreychuk
Según un relevamiento sobre 180 comercios y pymes de la ciudad de Santa Fe realizado por la Oficina de Transformación Digital del municipio, el 50% de los encuestados se encuentra en un estado de “desarrollo básico” en lo que corresponde a procesos de tránsito hacia la transformación digital de sus empresas, y el 13,6% directamente reconoce que “no ha comenzado” ningún tipo de iniciativa al respecto.
Aquí también aparece la pandemia, de la cual todavía se padecen los coletazos que dejó, tras tantos meses de parate en la economía local, take away y horarios acotados para las ventas presenciales: el 70,4% de los empresarios encuestados coincidieron en que la crisis sanitaria “aceleró la necesidad” de recurrir a las estrategias digitales para poder sobrevivir a los nuevos hábitos de consumo locales.
Estos datos preliminares dan un contexto: el futuro ya llegó hace rato y, para que un comercio o empresa pyme local mejoren su eficacia y sus procesos productivos, deben transformarse hacia lo digital. No sólo para subsistir, sino para lograr más volumen de ventas y competitividad. Ocurre que como en todo cambio, las resistencias no son tanto de los saberes a adquirir y recursos sino más bien culturales.
Pero ¿qué es la transformación digital? Por este concepto debe entenderse cualquier tipo de estrategia que se pueda desarrollar en una empresa de cualquier tamaño (micro, mediana o grande) para que, mediante el uso de las nuevas tecnologías, pueda alcanzar mayores grados de eficiencia y de competitividad. “Ser más productivos, básicamente”, le explica a El Litoral Eugenio Serafino, director Director de Innovación y Desarrollo, área que depende de la secretaría de Producción y Desarrollo Económico municipal.
“Comenzamos con un relevamiento de las demandas digitales sobre casi 200 empresas y comercios. Ese sondeo, tomado como base, busca detectar las necesidades en materia de saberes digitales y, luego, implementar herramientas de políticas públicas efectivas que permitan a las empresas de la ciudad mejorar su eficacia y competitividad”, dice el funcionario. Sólo hay cuatro ciudades que tienen áreas dedicadas a la transformación digital para los sectores productivos: Santa Fe, Rosario, Ciudad Autónoma de Buenos Aires y Córdoba.
Estrategias
Pero, ¿qué deben aprender los comercios y pymes para encaminarse a esa necesaria transformación digital? Las estrategias son muchas, están disponibles y al alcance de cualquier persona: “Hablamos de que un comerciante o empresario pyme de la ciudad aprenda a solucionar problemas, o sepa cómo es el acceso a líneas de financiamiento específico para atender determinadas situaciones; conozca las apps gratuitas para potenciar sus ventas, las herramientas del Workspace de Google, el software libre de gestión, las redes sociales…”, enumera algunos ejemplos el director del área.
Todo esto, a cualquier comercio, le puede resultar beneficioso en ahorro de tiempo, costos, y tener una gestión mucho más inteligente y eficiente. “Y para eso no se necesita tener un equipo de profesionales altamente capacitados. Un pequeño negocio textil de Aristóbulo del Valle puede pasar de anotar en libro manualmente, o con un planilla de Excel básico, a un software de gestión. Es totalmente realizable”, asegura el Serafino.
Barreras
La principal barrera hacia la transformación digital es cultural. “No es falta de recursos, sino cierta comodidad de seguir trabajando bajo la idea de: ‘Por qué voy a cambiar si mi negocio está laburando bien, y vivo de esto hace 30 años’. También está el miedo al cambio, que es lógico; cierta reticencia a incorporar herramientas tecnológicas para mejorar la productividad y la competitividad”, agrega Serafino.
Y la primera capacitación, que será este miércoles 27 de julio (ya hay más de 100 inscriptos), estará orientada a romper con esos temores: “Se hablará de la gestión organizacional del cambio, qué quiere decir transformación digital y por qué es tan importante, lo alcanzable que es un plan de transformación incorporando tecnologías en cualquier tipo de emprendimiento”, agrega el director de Innovación y Desarrollo.
Debe quedar en claro que esta iniciativa apunta, con la “bandera” de la transformación digital, a poner en igualdad de condiciones a los que no pudieron sumarse aún a esta tendencia, que es mundial, y con los que sí ya lo lograron. “Hay comercios y empresas que ya se consolidaron en el cambio tecnológico, incluso previo a la pandemia, pero otros que no se subieron a la ola y quedaron rezagados: no tienen las herramientas o se enfrentan a esas barreras a las que hacía mención antes”, concluye Serafino.
Detectar necesidades
“Con el lanzamiento de la Oficina de Transformación Digital venimos trabajando con los distintos sectores, el comercio y las pymes. Se hizo un relevamiento para ver cuáles eran las necesidades del sector comercial de la ciudad en materia de herramientas digitales”, declaró Matías Schmüth, secretario de Producción y Desarrollo Económico municipal.
En el Centro Comercial de Santa Fe se comenzará con la primera capacitación este miércoles. “Se hará una presentación del relevamiento del que participaron casi 200 empresas pymes locales y el cual nos permitió poder tener fundamentos a seguir desde la Oficina de Transformación Digital, un área que busca ser un medio entre las herramientas digitales y los comercios para que puedan optimizar su funcionamiento”, cerró Schmüth.
Sobre la oficina
La Oficina de Transformación Digital se creó por ordenanza Nº 12.767, sancionada el año pasado, y comenzó en junio de 2022 a conformarse y trabajar, dentro de Capital Activa (espacio dedicado al emprendedurismo, el empleo y la innovación). Está orientada “hacia afuera”, es decir, hacia el sector productivo local, como ser mi-pymes (empresas micro, pequeñas y medianas, incluidos comercios) y pymes (empresas más grandes).