En el mercado mayorista el dólar recorta 30 centavos, a $38,92, en una jornada en la que la referencia de la zona de libre flotación exhibe un piso de $38,535 y ahora un lejano techo de 49,869 pesos.
Es decir que la brecha entre la cotización de mercado y el piso objetivo dispuesto por el Central es próximo a un escaso 1 por ciento. Para el martes 26, el piso se eleva a 38,562 pesos.
En sucursales del Banco Nación el dólar se opera a $39,80 para la venta, también con caída de 30 centavos.
Según Research for Traders, la operatoria en los mercados financieros “siguió marcada por la volatilidad cambiaria y que impulsó la dolarizaciónde las carteras en la semana, obligando al BCRA subir la tasa, recoger liquidez e intervenir en el mercado de futuros del dólar”.
“El BCRA con sus respectivos incrementos de tasas en las últimas ruedas contuvo las expectativas de subas continuas del dólar, generando una barrera de contención que pudiera dar indicios de un nuevo ciclo bajista de muy corto plazo que lo pudiera llevar otra vez al límite inferior de la zona de no intervención”, detallaron desde Research for Traders.
“Lo importante acá es tener en cuenta que todas las colocaciones que se hacen en pesos miran siempre de reojo al dólar. En cuanto esta divisa comience a despegar, habrá una gran presión del enorme flujo de posiciones en pesos hacia esta moneda”, advirtió Miguel Boggiano, director de Carta Financiera.
Con un incremento de más de cinco puntos porcentuales acumulado en las últimas seis jornadas financieras, la estrategia del BCRA consiguió desarmar la presión sobre el dólar mayorista que, de todos modos sube más de 4% en febrero.
La divisa de EEUU opera apenas 1% por encima del piso de no intervención del BCRA
“El Banco Central viró a una postura monetaria más restrictiva luego de que reviviera la volatilidad cambiaria, mientras los datos fiscales de enero dejaron sabor a poco y refuerzan nuestra expectativa de que finalmente no pueda alcanzarse el equilibrio fiscal primario”, reportó el Grupo SBS.
Fue “una abrupta escalada luego de una racha bajista de siete semanas consecutivas para frenar al dólar”, indicó Portfolio Personal Inversiones. “El mensaje es claro: no se permitirá semejante volatilidad en el tipo de cambio. Así, la cotización del dólar volvió a acercarse al piso de la banda“.
En un año electoral que será por definición volátil, el Gobierno apuesta a un sostenimiento de los depósitos en pesos, afianzados por tasas de interés positivas en términos reales, y a la vez retener a los fondos de inversión que reingresaron durante enero y las primeras dos semanas de febrero para posicionarse en acciones y bonos argentinos.
Al respecto, un informe de Puente destacó que “MSCI anunció que Argentina sería reclasificado al índice de ‘Mercados Emergentes’, pero también será mantenido en el índice de ‘Mercados Frontera-Emergentes’, lo que se interpreta como neutral o positivo porque significa que no habrá salida de capitales de los fondos que replican a dicho índice”.
El dólar suma en febrero un incremento superior al 4%
De algún modo, la entidad que preside Guido Sandleris conserva una carta ganadora en la manga: una determinante llegada de divisas por las liquidaciones de exportaciones de la agroindustria en el segundo trimestre de 2019, más la liquidez de divisas con la que contará el Tesoro por la llegada de un nuevo tramo del crédito del Fondo Monetario Internacional (FMI).
Estos dólares ayudarán a contener la demanda potenciada por la incertidumbre respecto del resultado las elecciones presidenciales, que se llevarán a cabo en un marco económico recesivo y de muy alta inflación.