Concesionarias operan con la peor rentabilidad en 10 años
YA CERRARON 20 AGENCIAS Y PELIGRAN 15.000 EMPLEOS, SEGÚN ACARA – Aunque el mercado cierre en 800.000 unidades, la abrupta baja de la demanda hizo que crecieran los stocks y los 0 km se vendan a “pérdida”.
Las concesionarias de autos cierran un 2018 para el olvido. Pensaban vender un millón de 0 km y terminarán arañando los 800.000, como consecuencia del derrumbe de la demanda a partir de la suba de precios que provocó el salto del dólar. Pero eso no es lo más grave ya que medido en unidades será uno de los tres mejores años de la historia; el problema no pasa por el volumen, sino por los ingresos. A esa cantidad de unidades se llegó a fuerza de descuentos muy fuertes durante el segundo semestre que pulverizó las ganancias. Según directivos de la asociación que agrupa al sector (ACARA), este será el peor año de los últimos diez en materia de rentabilidad. Hay que remontarse al 2008 para una situación parecida, por el fuerte freno económico que generó la crisis financiera internacional. Incluso, aseguran, que más allá de la red de alguna marca en especial (se referían a Toyota) y de casos puntuales de otras automotrices, la mayoría de las concesionarias trabajaron a pérdida durante la segunda parte del año.
La consecuencia de esta situación ya se siente. En ACARA estiman que ya cerraron unas 20 agencias (sobre un total de 800) y que peligran alrededor de 15.000 puestos de trabajo de los 45.000 que tiene el sector, es decir, más del 30% de los trabajadores. Esto se debe a que los empresarios pronostican una mayor caída de las operaciones para 2019. Según sus cálculos, los patentamientos del próximo año rondarán las 600.000 unidades, un 25% menos que el volumen de los últimos 12 meses.
Con motivo del cambio brusco de la demanda (los primeros cuatro meses fueron récord para caer bruscamente desde entonces), hay un sobrestock de unidades que se ubica en un pico histórico. Tal como adelantó Ámbito Financiero el martes, se estima que entre los depósitos de fábricas, concesionarias, importadores y puertos, hay 260.000 vehículos sin comprador. Esto cubre las necesidades del mercado para los próximos seis meses, al ritmo actual de la demanda. Un dato que explica este cálculo es que los boletos -las operaciones de compra que se realizan- cayeron 50% interanual. “La mayoría de las concesionarias están perdiendo millones de pesos por la caída de la demanda más el alto costo financiero que se paga por mantener el sotck después de 30 días. Las tasas llegan al 80%”, señaló durante un encuentro con periodistas por el fin de año Ricardo Salomé, tesorero de la entidad. El elevado costo del crédito también afectó al consumo y provocó que desapareciera la financiación. El otro golpe fuerte fue el derrumbe de los planes de ahorro que cayeron unos 10 puntos de participación medido en suscripciones. Si bien hay bonificaciones de precios, estas no corren para las ventas por este sistema que se fijan sobre la base del precio pleno. Los 0 km aumentaron en promedio un 80% en el año, con picos de 100%, según los modelos. Esto es lo que se incrementó la cuota de los planes y por eso hay varios reclamos judiciales para atenuar el impacto de este aumento.
Los empresarios se quejaron de las terminales por la política comercial. “Las terminales nos presionan para que tomemos más autos porque no hicieron vender los autos que no se vendían en Brasil. Pasamos de una política de margen comisional a cumplir objetivos”, dijo Rubén Beato, secretario general de ACARA.
Teniendo en cuenta el sobrestock de autos y las grandes bonificaciones, los empresarios estimaron que los 0 km están en valores bajos medidos en dólares. Una vez que se equilibre el flujo entre oferta y demanda, la situación va a cambiar. “Este es un buen momento para comprar autos porque hay muchas promociones. El año que viene van a subir los precios”, alertó Carlos Movio, gerente general de ACARA.