Opinión
Prepará bien tus valijas
En los próximos días seguramente más de uno se tomará las tan merecidas vacaciones y, como es lógico, deberá preparar qué cosas va a llevar al viaje.
Del mismo modo, te propongo hacer lo mismo con tu futuro año laboral, planificando lo más importante sin descuidar los detalles.
Luego, las sugerencias son:
- Llevá 3 tipos de calzados: uno livianito, uno para salir y otro para caminar.
El primero para cuando haga calor y quieras la mayor agilidad. El segundo, vas a
necesitarlo para ocasiones especiales y el tercero será indispensable para asegurar continuidad sin lastimarse.
En el orden del liderazgo, hay momentos en que “las papas queman” y es imperioso
accionar con velocidad, a costa de perder glamour.
El denominado contexto “caótico”, según el marco Cynefin, nos lo enseña con claridad. Así, podemos pensar en el momento inicial de la pandemia en el que muchísimas organizaciones se vieron tambaleantes y era crítico tomar decisiones veloces: home office, equipos híbridos, roles y puestos de trabajo creados de la noche a la mañana… Agilidad…
En otras ocasiones, los protocolos son claves para un entendimiento completo (imaginemos una negociación con un cliente de otro país. Si desconocemos sus hábitos podemos cometer errores graves y ejemplos en este sentido abundan).
Por último, el calzado de caminar alude a ser perseverante y sostener los procesos que
consideramos necesarios. Por caso, los proyectos ligados a transformaciones digitales o cambios culturales, en los que son más importantes la sostenibilidad que el impacto.
- Sumá siempre algo más, como repuesto.
Puedo llamarlo Plan B al referirme a organizaciones.
Seguramente me entenderán mejor quienes hayan tenido la mala fortuna de
manchar la primera cena de sus vacaciones su mejor camisa con vino. Si no llevó otra similar, quedará impedido de sentirse a gusto en las próximas noches. De ahí la recomendación, que podemos comparar con la necesidad de los líderes de tener preparado de antemano distintas alternativas por si la primera no funciona.
- Fundamental, los elementos de higiene personal.
Nadie puede dar el ejemplo si no muestra una imagen acorde.
Aquí, la falta de limpieza es equivalente a faltas éticas y por ello es clave asumir
que siempre estarán allí, tentándonos, tal y como lo hace la haraganería de no lavarse los dientes antes de ir a la cama.
- Siempre poné una bolsa vacía, para evitar que lo sucio se mezcle con lo limpio.
En el transcurso de la vida como líder muchas veces te toca tomar decisiones
antipáticas o que van en sentido contrario a lo que tu equipo desea.
La sugerencia es evitar que tus conductas en ese contexto se extiendan a las otras, por eso, es clave que te des un tiempo para conversar con la gente acerca de los distintos momentos, diferenciarlos con eficacia y así evitar que horaden tu legitimidad.
- Dejá siempre un espacio vacío. Importantísimo para alojar todo artículo que
compres en tus vacaciones.
En el trabajo se asemeja con no querer ocupar todos los espacios, para así lograr que otros puedan desarrollarse y mostrar sus capacidades.
- Menos, es más.
Dicen que los buenos viajeros son aquellos que tienen las valijas más chicas.
En las organizaciones debemos focalizarnos sobre lo importante y dejar de lado todo
aquello que no sume valor.
Del mismo modo que no podremos tener nuestra ropa sin arrugas si la valija revienta de chucherías innecesarias, tampoco podremos ser estratégicos si estamos plenos de roles operativos.