Luces y sombras de la exportación, según los empresarios en Thaifex
Cinco firmas de la región que exhiben sus productos en la ciudad de Bangkok describieron el escenario del mercado exportador para los diferentes sectores. Expectativas de crecimiento, pero también, planteos para que se reduzca la burocracia, se agilicen protocoles y se fijen políticas de estado en la materia.
Trabas burocráticas para protocolos y autorizaciones sanitarias, pérdida de competitividad, ausencia de políticas de estado que promuevan la exportación. Expectativa, posibilidad de abrir nuevos mercados, alternativas para consolidar vínculos ya iniciados y para concretar futuros negocios. Entre ambos andariveles, y con matices, transita la situación actual de las empresas santafesinas -y seguramente, muchas más- que exponen en Thaifex 2018. Aun con las complejidades descriptas, algunas asumen la participación en la muestra como búsqueda exploratoria de futuros embarques. Otras, esperan poder materializar operaciones como resultado de contactos ya iniciados.
El Litoral conversó con cinco empresas santafesinas, particularmente del centro norte de la provincia, para conocer sus inquietudes y aspiraciones frente a la muestra internacional de la que participan.
Insuga
Insuga es una empresa radicada en Recreo -también posee una planta en Chaco- y dedica su producción al tratamiento de residuos de faena para la elaboración de harina de carne y hueso.
Según contó, la empresa está solicitando la habilitación sanitaria correspondiente para poder enviar harina de carne y hueso también a Tailandia. “La zona en la que más estamos exportando ese producto es Camboya, Bangladesh, Tailandia, Taiwán, China y Vietnam”, precisó. En esta región del sudeste asiático, esas harinas se utilizan para la alimentación de pollos a través de la producción de alimentos para mascotas.
Sobre la situación de Argentina respecto de otros países en esta materia, Ardeti consideró que “estamos muy en desventaja con los productores paraguayos y brasileños, no sólo por la producción, sino por los altos costos de traslado interno que tenemos en el país. Como muchos saben, un traslado en camión desde Santa Fe a Buenos Aires es más caro de un embarque de Buenos Aires a Ho Chi Min”, ejemplificó.
Frigorífico Recreo
Gustavo Quirelli, gerente comercial de Frigorífico Recreo, contó a El Litoral que la empresa está tramitando las autorizaciones para poder vender a Tailandia. “Se hicieron todas las tramitaciones ante Senasa, y estamos esperando la visita de una delegación tailandesa para junio o julio; ello permitirá habilitar nuestras plantas para que comencemos a comercializar con ese país carnes congeladas”, explicó. La misma solicitud la han tramitada también con Vietnam. “Son países que con sus mejoras en el poder adquisitivo y el crecimiento de la clase media están incorporando proteínas a sus dietas, y por lo tanto, están empezando a consumir carnes vacunas”, comentó.
En particular, Frigorífico Recreo ofrece en esta parte del mundo derivados de la carne vacuna. “Los cortes como conocemos en Argentina no llegan a estos destinos para el uso que le damos nosotros. Hay carnes que vienen al uso industrial para las salchichas y otras que van con diversas formas de cocción (vapor). También el asado típico nuestro, pero sin hueso. Estos destinos son esencialmente carnes deshuesadas congeladas y fundamentalmente, solicitan cortes de carnes que sirven para moler; y el asado deshuesado que lo enrollan, lo congelan y lo cortan en tiras y así se consume. También algunos cortes de pulpa. Y piden menudencias. Eso tiene que ver con un hábito alimenticio. Sorprende, pero el librillo (uno de los estómagos de la vaca) que en nuestro país se desecha, en esta región se paga más que un corte de carne”, sorprendió.
Quirelli describió un escenario muy positivo para la exportación de carnes en Asia. “Hay chances de incrementar las ventas a China. Tuvimos hace horas la buena noticia de que nos aprobaron la posibilidad de vender a este país. Ello surge a partir de una visita que habíamos tenido en 2015 de sus autoridades. Se demoró; es una habilitación que lleva su tiempo pero finalmente se dio y nos permitirá llegar a un mercado que se lleva el 50% de la carne que Argentina exporta con una expectativa de crecimiento en valores y volúmenes. China hace dos años atrás consumía dos kilos de carne por habitante por año. Se propusieron incorporar mediante un plan de gobierno 300 millones de personas a la clase media por lo que el consumo creció a cuatro kilos por año. Ése es el consumo actual. Presentaron una nueva proyección para en 2027 incorporar 600 millones de personas más a la clase media y llevar el consumo per capita a diez kilos anuales. Ello, multiplicado por los 1300 millones de personas censados oficialmente, presenta perspectivas muy auspiciosas para la Argentina”, resumió.
Corlasa
Corlasa, radicada en la ciudad de Esperanza, produce leche en polvo, grasa negra de leche y desde hace dos meses, mozzarella chesse. “Exportamos la mitad de la producción ya desde hace diez años. Nuestro producto está en más de sesenta países de todo el mundo, y concentrados en oriente, Rusia y Latinoamérica. Con este nuevo producto que es la mozzarella tenemos mucha expectativa de colocarla en el sudeste asiático. Ya tenemos vínculos con Vietman, y otros países de la región. Con Vietnam es leche en polvo lo que exportamos”, contó Guillermo Perez Maza, su gerente comercial. Según dijo, la empresa está habilitada para exportar a cualquiera de estos países.
“El diez por ciento de nuestras exportaciones está orientado hoy a estos países. No es gran cosa porque estamos más concentrados en el mercado con leche en polvo. Pero ahora que comienza nuestra etapa de producción y exportación de mozzarella van a cambiar drásticamente los números porque están orientados básicamente a esta región del mundo”, adelantó. En rigor, los principales destinos de exportación de la firma son Rusia, Brasil y Argelia. “Allí vendemos leche en polvo y grasa negra de leche que es como una manteca concentrada”, describió.
La empresa nació en 2006, y según su gerente comercial, “rara vez tuvimos dos años de estabilidad continuos ya sea por causas climáticas, políticas o de escenario mundial. Pero siempre salimos adelante; es una empresa cuyo modelo de negocio es de mucha eficiencia, muy austera, y eso en los periodos de crisis nos mantiene a flote”.
Admitió, también, que la crisis del sector lechero “se ha sentido”. “Los últimos vaivenes en el tipo de cambio hacen que el productor lechero se vea desfavorecido porque ellos tienen insumos dolarizados y la leche no siempre reacciona al mismo tiempo que reacciona el dólar ya que el 80 por ciento se consume en el mercado interno. Estos desfasajes generan una pérdida por dos o tres meses hasta que se acomoda nuevamente el precio y vuelve a tomar nuevamente los valores que necesita sobre todo el tambero”, explicó. Aun así, dijo que las expectativas en la muestra son “positiva, aquí y en todo el mundo. La lechería argentina tiene todas las posibilidades para exportar y competir como lo estamos haciendo, con los más grandes del mundo”, definió. Corlasa tiene hoy 110 empleados. Allí se producen por día unos 450 mil litros de leche que producen 140 tambos de cien kilómetros a la redonda.
Agricultores Federados
El Jefe de Departamento de Comercio Exterior de Agricultores Federados Argentinos (AFA), Juan Pablo Volkart, consideró que para el sector de granos es muy significativo el mercado asiático. “El potencial para el nicho de granos es inconmensurable. Lo que estamos haciendo es desarrollar nuevos mercados y lograr negocios en mejores condiciones que se puedan trasladar como beneficio directo a todos nuestros productores agropecuarios. La cooperativa tiene más de 15 mil socios entre pequeños y medianos productores que necesitan de este gran esfuerzo que está haciendo la cooperativa, mostrar sus productos al mundo e intentar comercializarlo. Venimos de un 2018 muy complicado; atravesamos una de las peores sequías de los últimos años. Sin embargo, el sector sigue apostando a los mercados internacionales y esto es una muestra de ello. Estamos aquí como para poder reencontrarnos con nuestros potenciales clientes para explicarles también cuál es la situación coyuntural que está viviendo hoy el agro”, describió.
Sobre los protocolos necesarios para comercializar granos, comentó que si bien AFA viene operando desde hace muchos años, el paradigma de producción en Argentina. “Hay muchos productores que se están volcando a nuevos productos, como legumbres. Las legumbres están haciendo un paso muy importante en el consumo. El paradigma de consumo sobretodo de esta región se están volcando más al consumo de proteína vegetal que animal. Para eso se necesita un esfuerzo muy importante entre lo público y privado; el privado produce, pero necesitamos de acuerdos fitosanitarios para poder comercializar esa producción. Allí encontramos ciertas dificultades que esperemos que se puedan desarrollar de la mejor manera porque generalmente llevan mucho tiempo y se gestionan ante Senasa”, contó.
En el mismo sentido, lamentó que los tiempos para la parte comercial sean mucho más cortos que para la gestión diplomática y eso es un escollo que hay que vencer”. “La gran mayoría de habilitaciones para esta región de están en vías de obtenerse y eso es positivo. También hay una realidad de mercado. Hablando no solamente de Tailandia sino del sudeste asiático. Creemos que toda la producción que hoy tenemos para ofrecer tendría una alta demanda, pero también lo que notamos es que en la medida que vayamos agregando valor en la cadena cada vez se nos van presentando más dificultades. No sólo quieren materia prima, sino que cuando nosotros queremos llegar con productos de valor agregado cada vez que avanzamos en la cadena, nos vamos encontrando con pérdida de competitividad por otros orígenes que realmente son mucho más competitivos que nosotros. Competimos con mercados norteamericanos, con Europa, con Africa inclusive. Estamos haciendo un gran esfuerzo. El total de la oferta de AFA hoy ya se ve en más de 50 países. Pero necesitamos políticas de estado que de alguna manera puedan fomentar y colaborar para sortear todos los problemas que estamos teniendo y toda la pérdida de competitividad a medida que se va agregando valor”. Asimismo, reclamó mejoras en trámites, registros e infraestructura. “Ser mucho más eficientes en términos de logística. Necesitamos políticas de estado para promover la industrialización de nuestra materia prima”, aseveró. “No le podemos seguir dando la espalda al mundo alertó-. Los cambios que se fueron introduciendo en lo público- privado han sido muy importantes pero tenemos que seguir apostando a esto y el desafío de estar presentes en esta feria para Afa es muy importante”, concluyó.
Friar
Tomás Moschen, Vendedor de Exportaciones de Friar, recordó que la empresa cuenta con dos plantas que producen y faenan carne bovina para la exportación y venta de mercado externo e interno, empleando a 1400 trabajadores.
“También tenemos producción de hamburguesas, y con este país, tener las plantas habilitadas para la exportación es importante porque está muy interesado en las menudencias bovinas. En el caso de las menudencias explicó-, tenemos un convenio con una empresa exportadora argentina que es responsable de ello y nos provee un poco de liquidez a la hora de la venta de las mismas”.
Sobre la posibilidad de generar nuevos clientes en esta región del sudeste asiático, aseguró que “están atentos a la posibilidad de generar un impacto tratando de exportar cada vez más carne vacuna. Hoy en día Tailandia está muy alta en lo que es aviar y porcino, por eso no hay muchos pedidos, pero siempre estamos atentos insistió-. Esperamos que a partir de esta feria podamos darnos a conocer”.